Nuestra experiencia con la tormenta de arena que marcó nuestro viaje a Jordania
Petra, Jordania, 8 de Semptiembre de 2015
Esta mañana nos hemos despertado con el ambiente completamente inundado de arena. Nos dolían la garganta y todas las superficies de la habitación estaban polvorientas. Nos hemos quedado impresionados porque no entendíamos lo que estaba pasando. Después hemos salido fuera de la habitación para ir a desayunar y a través de la ventana hemos visto que prácticamente no se veía el edificio de delante nuestro porque había como una especiede niebla extraña.
Ya en el transporte, el guía nos ha explicado que se trataba de una tormenta de arena proviniente del norte de Siria y que como mínimo estaría así durante las próximas 24 horas, y lo peor, que estaba afectando a toda Jordania. Sin duda esto ha condicionado todo el tour de hoy porque por ejemplo hemos ido al el monte donde Moisés avistó la tierra prometida, y de ahí sólo hemos sacado una conclusión y es que el día en el que eso pasó no había tormenta de arena.
Es complejo respirar en medio de una tormenta de arena, moverse cansa más de lo normal y a pesar que hace más calor, el sol no te da directamente (que eso es bueno). Pero parece que no a todos nos afecta igual porque hemos visto un grupo de locos intrepidos que se estaban preparado para hacer una ruta en bicicletas de montaña.
Durante el día han pasado cosas relacionadas con este tema, por ejemplo, el guía ha salido a comprar mascarillas por si la tormenta empeoraba y a la hora de comer, hemos parado en un bar de carretera en medio de la carretera del desierto y desde la puerta del bar costaba ver a los coches que pasaban a menos de 300 metros.
Por la tarde, la cosa se ha aligerado un poco aunque la tormenta de arena seguía activa.
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